Los sindicatos protestan la medida que les recortaría beneficios establecidos en sus convenios colectivos.
Luego que la Cámara de Representantes aprobó este viernes la Ley de Sustentabilidad Fiscal y Operacional, los líderes sindicales de la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (Utier), entre otros sindicatos de las corporaciones públicas, prometieron intensificar sus acciones de protesta contra el Gobierno.
Las empleados de las uniones de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), como la Unión Insular de Trabajadores Industriales y Construcciones Eléctricas (Uitice) y la Unión de Profesionales de Energía Eléctrica, encabezaron la jornada de protesta contra la medida que les recortaría beneficios establecidos en sus convenios colectivos. Llegaron al Capitolio desde tempranas horas del viernes.
Pero también se hicieron sentir durante la sesión de la Cámara de Representantes en el interior del hemiciclo, donde se discutió y, posteriormente, se aprobó el proyecto de ley. Durante el proceso, decenas de unionados le gritaron improperios a los legisladores mientras emitían su voto, que fue de 26-19, con dos abstenciones.
“Se nos quitó prácticamente todos los derechos que habíamos alcanzado en los pasados 73 años. No nos tienen que quitar estos derechos para poder echar para adelante la Autoridad”, sostuvo el expresidente de la Utier, Ricardo Santos.
Pero la manifestación de ayer también estuvo marcada por incidentes de violencia protagonizados por unionados contra uniformados, miembros de los medios de comunicación y empleados del Capitolio.
Además de los insultos que se lanzaron contra los legisladores en las gradas del hemiciclo, los unionados exigieron la salida de los medios de comunicación durante la manifestación que se escenificó en el lado norte del Capitolio en la tarde. Los manifestantes arrojaron botellas de agua contra reporteros y fotoperiodistas mientras gritaban a coro palabras como “rata” o “chota”.
“Lamento mucho que haya pasado esta situación, pero hay mucha tensión en el País”, indicó Santos al señalar que los unionados estaban molestos por un programa especial que se transmitió por televisión hace varias semanas sobre el alto costo de la facturación de energía en la Isla.
Por un momento, se desató una escaramuza entre agentes de la Policía y unionados que se abalanzaron contra barricadas de seguridad colocadas en las afueras del Capitolio luego que se aprobara el proyecto.
Por su parte, el presidente de la Utier, Ángel Figueroa Jaramillo, pidió que se respetara a los periodistas, aunque varios informadores tuvieron que abandonar la entrada del Capitolio a instancias de la Policía.
Entretanto, otros líderes sindicalistas instaron al gobernador Alejandro García Padilla a detener la aprobación de la medida.
“Nosotros no podemos negociar con un cuchillo en el cuello. Es falso que no hay dinero. Acueductos tiene $552 millones en contratos. Aunque hay algunos proyectos necesarios, ahí se puede cortar grasa. En la Corporación del Fondo del Seguro del Estado pasa lo mismo y la historia se repite en otras agencias, como en el Banco Gubernamental de Fomento”, sostuvo el presidente de la Central Puertorriqueña de Trabajadores, Víctor Villalba, quien representa unos 20,000 empleados públicos y privados.
“Nosotros hemos cabildeado en el Senado, pero si García Padilla se mantiene en su posición, seguirá acrecentando la lucha de los trabajadores. Es lamentable la demagogia del gobernador”, añadió el líder sindical.
Por Francisco Rodríguez-BurnsLas empleados de las uniones de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), como la Unión Insular de Trabajadores Industriales y Construcciones Eléctricas (Uitice) y la Unión de Profesionales de Energía Eléctrica, encabezaron la jornada de protesta contra la medida que les recortaría beneficios establecidos en sus convenios colectivos. Llegaron al Capitolio desde tempranas horas del viernes.
Pero también se hicieron sentir durante la sesión de la Cámara de Representantes en el interior del hemiciclo, donde se discutió y, posteriormente, se aprobó el proyecto de ley. Durante el proceso, decenas de unionados le gritaron improperios a los legisladores mientras emitían su voto, que fue de 26-19, con dos abstenciones.
“Se nos quitó prácticamente todos los derechos que habíamos alcanzado en los pasados 73 años. No nos tienen que quitar estos derechos para poder echar para adelante la Autoridad”, sostuvo el expresidente de la Utier, Ricardo Santos.
Pero la manifestación de ayer también estuvo marcada por incidentes de violencia protagonizados por unionados contra uniformados, miembros de los medios de comunicación y empleados del Capitolio.
Además de los insultos que se lanzaron contra los legisladores en las gradas del hemiciclo, los unionados exigieron la salida de los medios de comunicación durante la manifestación que se escenificó en el lado norte del Capitolio en la tarde. Los manifestantes arrojaron botellas de agua contra reporteros y fotoperiodistas mientras gritaban a coro palabras como “rata” o “chota”.
“Lamento mucho que haya pasado esta situación, pero hay mucha tensión en el País”, indicó Santos al señalar que los unionados estaban molestos por un programa especial que se transmitió por televisión hace varias semanas sobre el alto costo de la facturación de energía en la Isla.
Por un momento, se desató una escaramuza entre agentes de la Policía y unionados que se abalanzaron contra barricadas de seguridad colocadas en las afueras del Capitolio luego que se aprobara el proyecto.
Por su parte, el presidente de la Utier, Ángel Figueroa Jaramillo, pidió que se respetara a los periodistas, aunque varios informadores tuvieron que abandonar la entrada del Capitolio a instancias de la Policía.
Entretanto, otros líderes sindicalistas instaron al gobernador Alejandro García Padilla a detener la aprobación de la medida.
“Nosotros no podemos negociar con un cuchillo en el cuello. Es falso que no hay dinero. Acueductos tiene $552 millones en contratos. Aunque hay algunos proyectos necesarios, ahí se puede cortar grasa. En la Corporación del Fondo del Seguro del Estado pasa lo mismo y la historia se repite en otras agencias, como en el Banco Gubernamental de Fomento”, sostuvo el presidente de la Central Puertorriqueña de Trabajadores, Víctor Villalba, quien representa unos 20,000 empleados públicos y privados.
“Nosotros hemos cabildeado en el Senado, pero si García Padilla se mantiene en su posición, seguirá acrecentando la lucha de los trabajadores. Es lamentable la demagogia del gobernador”, añadió el líder sindical.
Líderes de varios sindicatos anuncian que intensificarán las protestas
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